Prueba Toyota Corolla Active Tech 125H 2021: ¿El candidato perfecto? ¿Un Golf Killer?

Sin embargo, hay un refrán que dice: “rectificar es de sabios” y eso hicieron los de Toyota, rectificar y en el año 2019 volvieron a lanzar el Corolla para defenderse en el segmento de los compactos y sustituir al Toyota Auris.

Y, tal y como te mostraré a lo largo de esta prueba de sensaciones al volante, la verdad es que este compacto mejora en todo, sin ninguna excepción, empezando por su gama que es muy completa. Dispone de 3 variantes de carrocería, 4 niveles de equipamiento y dos mecánicas híbridas. Se acabó eso de los motores diésel y gasolina para los modelos de Toyota.

En concreto, para esta prueba he escogido la versión del Toyota Corolla Hatchback, es decir, la carrocería de cinco puertas con el motor híbrido de 125 CV y el acabado Active Tech, tal vez la combinación más recomendable por su relación precio-equipamiento.

¿Es el Toyota Corolla 2021 la mejor alternativa del mercado?

Una afirmación absoluta de esto no sería correcta ya que la respuesta depende mucho de las necesidades de cada uno, pero desde luego sí que es una de las mejores alternativas y debería de estar entre los candidatos a tener en cuenta. 

Su precio oficial es demasiado elevado pero con las campañas y ayudas hacen que la unidad que he probado esta semana se quede por debajo de los 22.000 euros, y esta si que es una cifra muy interesante para barajarlo como opción.

¿Sus puntos fuertes?: sus consumos, la etiqueta ECO, la facilidad de uso y la imagen de fiabilidad de Toyota. ¿Sus debilidades?: Unas plazas traseras algo agobiantes para personas altas y una iluminación delantera en la media del segmento, al menos en este acabado, con una luz algo pobre y dispersa ya que, en este acabado los faros son de parábola de led, mientras que en los acabados tope de gama, los faros son bi-led y adaptativos, lo que mejora considerablemente el haz de luz.

Frente a rivales como el Mazda3, el Corolla pierde en diseño y en la calidad percibida cuando estamos dentro, pero a cambio, tenemos unos consumos mucho más ajustados, una mayor facilidad de uso y un sistema híbrido en lugar de un sistema micro híbrido. Frente al Hyundai Ioniq híbrido, el Toyota gana en calidad percibida y en facilidad de uso, estando muy pero que muy igualados en todo lo demás.

Un diseño que llama la atención

El diseño es uno de los aspectos que más ha cambiado con respecto a su predecesor. Mientras que el Auris era un coche que pasaba inadvertido por sus líneas algo sobrias, en el Corolla se nota que se han esmerado bastante más y han conseguido unas formas redondeadas (al menos en la carrocería de cinco puertas) y un aspecto mucho más moderno y llamativo, que hace que más de algún viandante gire su cabeza al verte pasar.

En el frontal me ha llamado la atención lo finas que son las líneas de diseño y lo bien integrado que ha quedado el logotipo, enrasado con los faros mediante una pieza de negro piano. Esto le da al Toyota Corolla un toque muy elegante y más si le equipas el paquete Black Style o lo coges con el acabado Style.

El paquete Black Style cuesta 400 € más e incluye molduras negras en el marco de la parrilla, retrovisores en negro piano y molduras laterales también en negro. Este paquete le da un toque más deportivo al coche y si tenéis 400 € que os podáis gastar, hacerlo, que merece la pena a nivel estético.

La vista lateral está marcada por unas formas musculosas con un toque deportivo que le da al Toyota Corolla Hatchback un aspecto más juvenil y moderno que el Toyota Auris al que sucede. 

Esta carrocería Hatchback tiene un problema con respecto a la de un compacto convencional y es que, al tener esa caída del techo en la parte trasera, el acceso a las plazas traseras, en lo que respecta a la altura, es más complicado y eso para las personas de más de metro ochenta de altura puede llegar a ser un inconveniente.

La parte trasera desde mi punto de vista es quizás la más bonita de todo el coche. Tenemos unos grupos ópticos muy visibles y también formas redondeadas que no están reñidas con la practicidad y dejan un amplio portón de carga para el maletero.

También me llama la atención el enorme paragolpes trasero del que dispone el Toyota Corolla ya que al ser tan grande, es muy fácil de que podamos arañarlo aparcando marcha atrás. 

En resumen: el Toyota Corolla 2021 ha ganado en atractivo con una imagen mucho más seductora y moderna que el modelo precedente.

Un interior renovado y con buenos materiales

Si el diseño exterior es atractivo, el interior lo es mucho más y sobre todo, mucho más llamativo que en el Auris, aunque siguen predominando las formas rectas y líneas horizontales que definen el salpicadero.

Esto es cuestión de gustos y puede gustar más o menos, pero de lo que no hay ninguna duda es de la calidad de los materiales. Todas las superficies del salpicadero son de tacto blando y de buena textura y todos los mandos que se pueden tocar dan una magnífica impresión. 

A nivel ergonómico el Toyota Corolla tiene una buena postura de conducción y tiene todos los mandos principales muy a mano. En toyota han querido asemejar más sus híbridos a los coches convencionales y han dicho adiós a la pequeña palanca de tipo joystick para incorporar un selector de cambio convencional. 

Sin movernos de la zona del selector de cambio, tenemos el hueco para el cargador inalámbrico por inducción con suelo antideslizante (disponible en los acabado altos de gama), que está bien ubicado para evitar la tentación de usar el móvil durante la conducción, pero que dispone de un buen acceso. 

También en esa zona se encuentran: el selector de los modos de conducción, el botón EV (para forzar al coche a circular en modo 100 % eléctrico durante unos pocos kilómetros), el botón del Auto Hold, el freno de mano eléctrico y dos portabebidas.

La instrumentación es bastante completa y combina tres diales analógicos (para las revoluciones, la temperatura del refrigerante y el nivel de combustible) con una pantalla digital que puede mostrar una información muy diversa pero tremendamente eficaz y muy personalizable. 

Lo único que no me gusta de este tacómetro es que en los modelos que llevan navegador no se puede ver el mapa en el tacómetro, únicamente se pueden ver las indicaciones, pero esto ya va en función de los gustos y necesidades de cada uno.

Desde el tacómetro se configura prácticamente todo el coche, desde los asistentes a la conducción, pasando por la apertura del coche, los grafismos de la pantalla hasta llegar a la monitorización de todos los parámetros en tiempo real del coche. (Consumo medio, consumo tras el arranque, consumo instantáneo, autonomía disponible, sistema de luces largas, etc.)

La pantalla del sistema multimedia tiene un gran tamaño y está situada a la altura ideal, lo que hace que este muy a mano, pero los menús y la navegación por ellos son algo engorrosos pese a tener varias teclas de acceso directo, que se agradecen bastante por cierto. Además a nivel de gráficos es algo pobre en comparación con sus rivales, tanto que parece que hayamos vuelto a un coche de hace 5 años.

Aunque claro, todo esto Toyota lo soluciona introduciendo por fín en los modelos del 2021 y en todos los ya vendidos del Corolla (previo pago de la actualización) Apple CarPlay y Android Auto, aunque eso sí, por cable. 

Esto hace que ya no sea el sistema multimedia del coche el que se muestra en la pantalla, si no el de tu smartphone, lo que hace que puedas usar navegadores como Google Maps o Waze.

Si delante se va de cine y con mucho espacio, detrás no se puede decir lo mismo y no es porque los asientos traseros sean incómodos sino porque no hay mucho espacio detrás, ni para la cabeza ni para las rodillas.

Si delante va un conductor de 1,80 metros de alto, atrás pegas con las piernas en el respaldo y además, como he mencionado antes, el acceso es incómodo debido a su carrocería, aunque bueno, para eso está la carrocería familiar o la berlina. 

Un maletero en la media del segmento

La capacidad del maletero del Toyota Corolla hatchback es de 361 litros, lo normal en esta categoría. Esta capacidad se debe a que las baterías no roban espacio de carga (van bajo la banqueta trasera) y tenemos unas formas muy cúbicas y aprovechables. Si necesitamos ampliar el volumen, se pueden abatir los respaldos por mitades asimétricas en proporciones 40/60.

Como conclusión, se podría decir que el Corolla está entre los mejores de su categoría en cuanto a la calidad de materiales y el confort que ofrece a sus pasajeros, pero su amplitud, sobre todo en las plazas traseras es discreta dentro de la categoría.

Un motor que lo sitúa por delante de muchos rivales con mucho rendimiento y poco consumo

El sistema híbrido ha mejorado mucho en el Corolla con respecto al Auris que sucede y, aunque básicamente se trata del mismo motor 1.8 de 4 cilindros de gasolina combinado con un motor eléctrico y la peculiar transmisión Transaxle de Toyota del modelo anterior, este motor se ha actualizado y ahora rinde mucho, pero que mucho mejor que el de la generación anterior. Para que te hagas una idea, son como la noche y el día en lo que respecta al rendimiento.

Sus 122 CV parecen más gracias a una nueva gestión de la transmisión que hace que sus reacciones sean más directas y desaparezca casi por completo esa sensación de ir medio desembragado cuando aceleras a fondo. O mejor dicho, prácticamente desaparece la sensación de que el sonido de la aceleración no corresponde con la velocidad ganada.

Sin embargo, la gran ventaja está en que ahora se puede circular en modo eléctrico en muchas más ocasiones y durante mucho más tiempo cuando vamos a punta de gas, algo decisivo a la hora de mejorar los consumos, que han sido muy buenos durante toda la semana de prueba. Para que te hagas una idea, a 120 km/h, punta de gas y pendiente descendente, el coche es capaz de circular en modo 100 % eléctrico.

Mediante dos teclas por delante del selector del cambio podemos elegir entre 4 modos de conducción diferentes:

• EV: este modo hace que el coche funcione en modo 100 % eléctrico y aunque no se puede activar por encima de 45 km/h o si las baterías están muy agotadas, lo cierto es que en muchas ocasiones te encuentras rodando entre 70 y 120 km/h a punta de gas con el motor de combustión apagado y con un leve empuje del eléctrico y eso mola bastante. Aunque este modo está pensado para la ciudad y para poder recorrer unos 4 km a baja velocidad sin gastar ni una gota de combustible.
• Normal: es el modo en el que siempre enciende el coche (a excepción de si dejamos el modo ECO puesto) y busca un compromiso entre prestaciones y rendimiento energético. Lo cierto que este es el modo que más he usado porque el ECO capa mucho el acelerador y el Sport lo vuelve muy reactivo, así que, para mí, este es el modo ideal.
• Eco: busca el mínimo consumo maximizando el tiempo que funciona en modo eléctrico y suavizando la respuesta del acelerador y de la climatización.
• Sport: para lograr las máximas prestaciones mantiene encendido más tiempo el motor de combustión, el acelerador es más sensible y el sistema de transmisión usa desarrollos más cortos para mejorar las recuperaciones y aceleraciones. Este modo es ideal para pasartelo como un niño pequeño en un puerto de montaña y para poder estrujar los 122 CV del conjunto.

Además de estos modos de funcionamiento, como el Toyota Corolla no dispone de marchas, en la palanca de cambios disponemos de una posición B que lo que hace es generar más freno motor acoplando la mecánica de combustión a la transmisión. De este modo retenemos más pero a costa de recargar algo menos las baterías. Sólo es interesante usarlo cuando las baterías están ya completamente cargadas o si es un descenso muy pronunciado y prolongado.

Su comportamiento es fácil y cómodo

Ahora llega el momento de contarte mis sensaciones al volante del Toyota Corolla 5 puertas 2021 y lo primero de todo que te quiero comentar es que la postura de conducción es muy cómoda y tenemos un buen campo de visión gracias a la gran cantidad de superficie acristalada. 

Lo segundo es que todo es sumamente fácil a bordo y basta con abrocharnos el cinturón y pulsar el botón de arranque para que el Corolla esté listo para iniciar la marcha, sin ningún ruido de motor encendiéndose en la mayoría de las ocasiones, a excepción claro está de cuando la batería está agotada 🙄.

La dirección es muy suave y suficientemente rápida con apenas 2,5 vueltas de volante entre topes. Para los conductores más exigentes puede resultar demasiado asistida y poco informativa, pero para la mayoría es muy cómoda, especialmente para las maniobras de aparcamiento y la circulación por ciudad.

Hablando de la ciudad, es allí donde más se disfruta de la conducción del Corolla híbrido, ya que este coche es muy silencioso y más si somos algo cuidadosos con el gas ya que, casi siempre rodará en modo eléctrico. Para que te hagas una idea, con la app MyT de Toyota, pude monitorizar los viajes que realizaba y en la mayoría de ellos, era más del 65 % del trayecto lo que me hacía en modo 100 % eléctrico.

El cambio automático y la buena visibilidad también hacen muy fácil rodar con él en tráfico urbano. Además, mientras que en los coches convencionales al apagarse el motor con el start & Stop en los semáforos deja de funcionar el aire acondicionado, en el Corolla no perdemos confort del sistema de climatización mientras estamos detenidos ya que es el motor eléctrico el que lo mantiene encendido y eso en pleno verano es un gran punto a favor.

Todo es muy sencillo en el Corolla. Uno se adapta a él rápidamente y se conduce muy fácilmente, lo que quita mucho estrés al conductor. Sólo hay que estar pendiente del tráfico, el freno y el acelerador.

Las suspensiones están claramente pensadas para hacer más cómodos los viajes a los pasajeros y son algo blandas, pero esto no implica unos balanceos de carrocería molestos ni reacciones demasiado torpes. 

El truco está en que las geometrías de las suspensiones son buenas, tenemos un centro de gravedad bajo debido a la ubicación de las baterías y el chasis es bastante rígido, de modo que no hacen falta unas suspensiones como tablas para mantener las cosas en su sitio. Es más, te puedo decir que el Toyota Corolla híbrido 2021 5 puertas es uno de los coches que más me han gustado a la hora de avivar el ritmo.

Hablando de avivar el ritmo, si lo hacemos te garantizo que el Corolla te va a responder con unas reacciones muy nobles en todo momento y no va nada mal, pero claramente es un coche que acaba llevándote a su terreno y al final acabas desistiendo de una conducción agresiva, que suele ser absurda. 

De hecho un buen conductor es el que consigue ir rápido sin ser brusco, y precisamente eso es lo que te pide el Corolla, no ser brusco. Pero te lo pide por la naturaleza de su motor, no porque su chasis no lo permita. Es más, en carreteras secundarias hace gala de una nobleza envidiable que deja atrás a muchos de sus rivales y es muy difícil cometer un error tan grave como para llevarnos un susto, aunque sea leve.

Algo parecido sucede a la hora de viajar por autopista y autovía. En estas condiciones el coche funciona casi permanentemente con el motor de combustión encendido para mantener los cruceros de 120 km/h y por eso obtiene los consumos menos favorables en esas condiciones. 

El paso por curva rápida transmite confianza y los viajes resultan cómodos para los pasajeros ya que apenas se nota nada en su interior. Además, está tan bien aislado que el único ruido que escucharemos del exterior será el de rodadura.

El equipamiento de serie es muy completo

En función de los acabados hay disponible dos motores, el 125H con 122 CV y el 180H con 184 CV. Este último motor está reservado para los acabados Feel, GR-Sport y Avance, mientras que el 125H se puede escoger en el Business Plus, Active Tech y Feel.

El acabado Active Tech arranca en 22.100 € sin descuentos y es el segundo de la gama. Por encima de él tendríamos el Feel, GR-Sport y el Advance y por debajo tenemos el Business Plus, reservado para flotas. 

Aunque en esta unidad se podrían haber añadido algunos extras como el navegador o las llantas en color negro, su nivel de equipamiento de serie es más que correcto, especialmente en asistentes avanzados a la conducción, los llamados ADAS que en Toyota se incluyen dentro del Toyota Safety Sense, entre los que tenemos:

• Control de crucero adaptativo
• Cámara de marcha atrás
• Alerta de pérdida de carril con mantenimiento en el mismo (conducción semi asistida)
• Sistema de reconocimiento de señales de tráfico
• Alerta de colisión con frenado de emergencia
• Asistente de luz de carretera
• Sensor de ángulo muerto
• Alerta de tráfico cruzado

Aparte de todos estos sistemas de seguridad tenemos elementos como el climatizador de doble zona, el sistema de audio de buena calidad, espejos foto sensibles y por supuesto un sistema multimedia preparado para sacar partido al Smartphone, con la posibilidad del manejo mediante el mirror link, Apple CarPlay, Android Auto y, además, conexión Wifi para poder actualizar los mapas o el software del coche.

Algo que no me gusta demasiado en cuanto a su equipamiento es la asistencia al aparcamiento sólo mediante una cámara trasera. Prefiero los sensores con sonido que me permiten saber si me acerco a un obstáculo mientras que por los retrovisores y por las ventanas delanteras me aseguro de que no se acercan niños o cualquier otra posible incidencia. 

La cámara de marcha atrás nos obliga a mirar aquí y desviamos la vista de hacia donde se desplazan las esquinas delanteras, que pueden ir contra una columna sin ningún tipo de alerta al respecto. Para ver más en detalle todo su equipamiento te recomiendo que pulses aquí y para ir al configurador oficial de la marca.

Consume como un diésel de 90 CV

Los consumos de este Toyota Corolla han sido una agradable sorpresa y prácticamente son calcados a los valores oficiales, que son muy buenos. Es muy probable que sea éste el apartado en el que más ha mejorado el Corolla frente al Auris precedente, gracias a una mejor puesta a punto del sistema híbrido, que optimiza mucho más su rendimiento en esta nueva generación.

Aunque en ciudad es difícil lograr los 3,2 l/100 km de consumo homologado, tampoco nos disparamos mucho en uso real y la media apenas llega a los 4 l/100 km, un registro realmente bueno.

En carretera, con cruceros entre 70 y 100 km/h, es fácil rondar el valor oficial de los 3,6 l/100 km, también un valor excelente y sólo en autopista y autovías manteniendo los 120 km/h la cosa se va hasta los 5,2 l/100 km.

Con estos valores de consumo, aunque su depósito es de sólo 43 litros, es fácil lograr una autonomía de más de 750 km con el Toyota Corolla 125H Active Tech 2021.

Para terminar este artículo quiero mencionar que yo me quedaría con el acabado Feel y el motor de 184 CV ya que esta combinación me parece la ideal en lo referente a potencia, peso y aceleración. 

Por otro lado este es un claro rival del Golf y aunque el Toyota Corolla de 5 puertas pierda en habitabilidad interior en el resto de los puntos están muy igualados, por no decir que en la mayoría de cosas le supera, como por ejemplo en la potencia del motor y en sus consumos. Así que, contestando a la pregunta inicial, sí, este es un candidato para tener muy en cuenta